La maldición judía

La maldición judía – Thor Demanhoffer

30.00

Sin existencias

ISBN: 978-84-9946-486-2
Páginas: 340
Sello: edición personal
Edición: 1ª edición, junio 2017
Depósito legal: M-12101-2017

La maldición judía: De cómo la bella, inteligente y poderosa hija de un banquero judío es secuestrada a plena luz del día, en pleno centro mercantil de Londres. De cómo ella se confiesa pecadora, arrepentida y merecedora del secuestro, del brutal apaleamiento, del intento de desvirgamiento y de cómo su padre la saca de su error conceptual.
De cómo el banquero compara el vicio sexual solitario de su hija con las conductas de un patriarca Abraham que, a cambio de riqueza, cede el goce carnal de su mujer, Sara, al faraón de Egipto. De cómo el valiente poeta rey David seduce a la hermosa Betsabé y envía al matadero a su marido, el leal soldado Urías. Y de cómo las hijas de Lot, después del exterminio de Sodoma, emborrachan y fornican con su propio padre.
De cómo un malvado chismorreo, con base real, desmorona el ánimo recuperado de la hija del poderoso banquero y de cómo padre e hija y séquito huyen en yate para escapar de las miradas inmisericordiosas de la alta sociedad londinense que frecuentan.
De cómo el banquero don Salomón sustenta la tesis de que fueron altos dignatarios judíos conversos, y no los «malvados» Reyes Católicos, los que en realidad decidieron la expulsión en 1492 de los judíos que se negaron convertirse al cristianismo.
De cómo George, el guardaespaldas de la hija del banquero, se convierte en héroe al detectar en los bajos fondos de Londres a los secuestradores y de cómo consigue recuperar la valiosa colección de byzantius.
De cómo la hija del banquero que, sin humor y sin amor, se había entregado de nuevo al vicio sexual solitario, ya sin prejuicio onanista, es captado por su padre para una operación intelectual de fuste.
De cómo el banquero don Solomón pone en manos de su hija su proyecto intelectual secreto: demostrar, mediante terceros independientes, la superioridad técnica y moral del capitalismo sobre el socialismo.
De cómo un trío extraordinario formado por un judío, licenciado en Medicina; un cristiano, paseante de perros, y un musulmán, doctor en Filosofía Pura, trabajan para cambiar el mundo. De cómo Séphora, la hija de don Solomón, seducida por el proyecto de su padre, se pone al frente del mismo y, después de unos avatares calamitosos, se amanceba con el paseante de perros.
De cómo el cristiano, sin título académico alguno y después de digerir cientos de tratados, concluye que el origen de las crisis económicas está en el Deuteronomio, Libro V del Pentateuco o Biblia hebrea, llamada Torá por los judíos. De cómo el cristiano arguye que la redención del género humano por parte de Cristo no debió conllevar su muerte en la cruz, sino, simplemente, la denuncia argumentada del privilegio que Moisés concedió al pueblo elegido.
De cómo al judío, seleccionado para demostrar las tesis del banquero junto a sus compañeros, le sale la vena judaica e incita a don Salomón a acabar con la vida del cristiano, y el banquero, comprendiendo que ha abierto la caja de Pandora, ordena la muerte de los tres jóvenes superdotados porque, muertos los perros, no habrá testigos, y se acabará la rabia intelectual.

Thor Demanhoffert. El autor de esta novela histórica de ciencia (económica), ficción (criminal) e intriga (amorosa) es un pensador por cuenta propia, rara avis en el elenco de los filósofos profesionales, casi siempre adscritos a una disciplina o escuela filosófica.
Romper moldes, ir a contracorriente y orillar las «verdades» académicas oficiales no es una tarea fácil en cualquier campo del saber y, menos aún, en la pomposamente llamada Ciencia Económica, donde los intereses creados –tanto intelectuales como económicos– son de tal envergadura que su sola enumeración estremece al más osado. La perplejidad de este autor ante las teorías y prácticas económicas de los antiguos y de los modernos comenzó a derretirse cuando se enfrentó a las crisis económicas de ahora y de siempre con una consigna escueta y ametrallante: «qué pasa, por qué pasa, y si puede pasar de otra manera».
Lector voraz de doctrinas diversas, supo zafarse con habilidad de la elegancia doctrinaria de los mejores y se puso a discernir por cuenta propia, despreciando todo argumento de autoridad que no estuviera ratificado por hechos. Así descubrió que el único camino para atisbar la verdad desnuda, sin adornos ni intereses espurios, era imputar a todos los teóricos del hecho económico la verguenza intelectual que impide a los deheredados del mundo tener ocupación con la que contribuir al bien común, empezando por el bien propio.