«Pilar, con el fin de mejorar su situación para que su vida fuese lo más «normal» posible, recurrió a lo que podría ser su salvación: un trasplante de riñón. El primero, aun con dificultades, salió hacia adelante, el segundo, que le donó su madre, falló, así como el tercero, que era de donante de cadáver, con el sufrimiento que le supuso, así como el deterioro que le produjo. Su intención fue siempre mejorar su vida y ocurrió el efecto contrario. Pero, a pesar de ello, no tira la toalla y espera a que le llegue un cuarto trasplante y que este salga con éxito. El mensaje es claro: con tesón, lucha y sacrificio se puede salir de cualquier situación compleja». Así comienza el artículo publicado por Carmen en su Tinta en su blog.
Lastest Update: febrero 17, 2022